viernes, 23 de enero de 2009

JUGAMOS?


Si decidieras unirte al destello que resplandece en los ojos de mi higuera, yo ensamblaría mis días a la luz que emana de las yemas de tu risa que no acaba, me enlazaría a los poros de tu piel necesitada y me ataría a la pureza de tus sentidos más sentidos.
Si resolvieras ser uno conmigo y abrigar mis domingos, te obsequiaría un millar de besos castos y todos mis escritos. Podría, incluso, bajarte la luna y cederte mi espacio, todo mi universo, mi mundo sin recelo, lo puro de lo innato.
Si quisieras abrazar mis labios para no soltarlos, con ellos haría el recorrido de tus manos hasta el mismo hartazgo, empalmaría la voluptuosidad de mi indecencia a las extremidades de tu cuerpo y me amarraría a tu delicadeza para acariciar tu vida sin tormentas.
Sin tan sólo lo desearas, te regalaría el hueco de mis alas y te entregaría hasta la última de mis palabras. Si realmente me necesitaras, dejaría el infinito para internarme en el cosmos de tus risas trasnochadas y protegería todo tu firmamento sólo con mi mirada.
Si tan sólo lo anhelaras…

lunes, 12 de enero de 2009

LÁGRIMAS


Te lloré a gritos,
te lloré a mares,
te lloré a escondidas,
te lloré hasta en Marte.

Te lloré con sangre,
te lloré con lava,
te lloré en mi cama,
te lloré sin ganas.

Te lloré las manos,
lloré las heridas,
te lloré descalza,
te lloré de día.

Te lloré de noche,
te lloré sin suerte,
te lloré la mente,
te lloré demente.

Te lloré hasta el cansancio,
hasta hundirme en el hartazgo.
Te lloré agotada,
abrazada a mi almohada.

Te lloré en silencio,
te lloré acostada,
te lloré sin tiempo
sólo esperanzada.

Y te lloré sin sueños,
sin lamentos,
sin espadas,
te lloré hasta el empacho,
hasta la muerte,
hasta corroerme la mirada.

Y te lloré de nuevo,
te lloré sin pies,
te lloré en tormento…

Te lloré
hasta
la última lágrima.

lunes, 5 de enero de 2009

TE ESPERO...


Te espero en silencio,
te espero agotada,
te espero con ganas.

Te espero sin prisas,
te espero de día,
te esperan mis risas.

Te espero aquí,
te espero ya,
te espero ahora.

Te espera mi voz,
te esperan mis manos,
te esperan mis horas.

Te espero con besos,
te espero extrañando,
te espero de lejos.

Te espero con palabras,
te espero entre mis sábanas,
te espero con más ganas.

Te espero de noche,
te espero sin derroche,
te espero trasnochada.

Te espero donde siempre,
te espero en remanente,
te espero esperanzada.

Te espero si hace frío,
te espero ya incendiada.

Te espero aunque te tenga,
te espero desbordada.

Te espero sin lamentos,
te espero entre mis alas.

domingo, 4 de enero de 2009

SÓLO...


Sólo necesito mis pies…
mis pies cobijando a mis sueños del olvido,
mis pies pisando fuerte para sentirte consciente,
mis pies en alto para besarte la frente,
mis pies en movimiento acompañando el sentimiento,
mis pies sin tormentas para llegar a tus metas,
mis pies llenos de sol para soñar con tu voz,
mis pies despiertos saboreando a tus pies dormidos,
mis pies vestidos para iluminarte los oídos,
mis pies desnudos para imaginarte dentro de mi mundo,
mis pies de día anhelando tu osadía,
mis pies de noche esperando tu derroche,
mis pies fingidos para no viajar con prisa,
mis pies sinceros descubriendo que te quiero,
mis pies trepados a tus pies,
mis pies sin pies,
mis pies llenos de besos que sólo poseen la codicia de morir en tu piel,
mis pies de primavera a la espera de tu hoguera,
mis pies de verano soñando con tus manos,
mis pies de otoño atiborrados de caricias para darte
y mis pies de invierno listos para no ponerle freno
… sólo mis pies.

sábado, 3 de enero de 2009

MIS RESERVAS...

En el cadalso
de mi soledad,
te espero.

En el altar
que habita en mi almohada,
en el último recoveco
sano de mi alma,
te espero.

En las mañanas
de mate con tostadas,
entre el fuego de las hornallas,
te espero.

Y en las risas
que se acumulan
en el hueco de mis alas,
te sueño.

jueves, 1 de enero de 2009

FELIZ 2009!

Si tuviera la suerte de que el año terminara… y empezara de nuevo, mantendría más abierta la sonrisa para reírme tanto o más que de costumbre, haría que los abrazos que doy duren el doble y lo haría con los ojos cerrados para sentir la buena energía que me otorga cada par de brazos abiertos en mí. Saldría a caminar abajo del sol de manera relajada como paseando por el mundo. Diría tres veces más te quieros y dos veces más te amos de los que normalmente digo para que la gente que adoro no lo olvide nunca. Tomaría mate hasta quedar verde compartiendo la bombilla y la buena conversación. Dormiría una hora más para no levantarme con ojeras y por ende, no necesitar maquillarme tanto. Me plancharía menos el pelo y más las ideas, que son las que más calor necesitan. Escribiría a diario para desahogarme y para ser leída, por placer y por manía, con prosa pensada y sin pensar en nada. Dibujaría más porque me sirve de terapia y es de las terapias sanas. Diría todo lo que pienso siempre que no sea para herir a alguien y me defendería un poquitito más. Compraría un par de alas de papel para ir en busca de mis sueños y dejaría de pensar que mis sueños están rotos. Comería más cajitas felices con mis sobrinas y más helados de limón y menta para llegar hasta la plaza a jugar. Miraría más películas de amor y menos de guerra. Iría más viernes al kabalat para sonreír viendo crecer mi espiritualidad. Lloraría el doble para saber que estoy viva y jugaría más con mi perro en retribución a su amor incondicional. Sería menos malhumorada a la mañana y desayunaría más temprano para lograrlo. Sería menos escéptica con el amor obsequiado y leería un libro todas las noches para ampliar los horizontes. Me dedicaría un poquito más a mí y un poquito menos al trabajo. Compraría flores más seguido. Volvería a cantar bajo la ducha…

Diría más seguido… que suerte que tengo!